Más allá de que los antojitos mexicanos constituyen una tradición llena de historia y cultura, un sinnúmero de mexicanos radicados en la Capital del Mundo tienen la oportunidad de seguir saboreándolo a miles de kilómetros de distancia de su país natal, siendo los Antojitos Mexicanos “La Doña”, una de las mejores opciones.
La historia de este excelente emprendimiento nació en el año 2012 de la mano de Areli Pacheco Flores, originaria de Puebla cuando abrió su primer punto de venta en la 94-11 37th, Ave. Jackson Heights NY 11372.
Clientes de diferentes nacionalidades
“Como todo negocio los primeros años no fueron nada fácil, pero a lo largo de todo este tiempo, contamos con una excelente clientela no solo de México, sino también de hispanos de otras nacionalidades”, afirma Pacheco, y agrega que “los antojitos mexicanos que ella prepara de manera higiénica y saludable también lo consumen afroamericanos incluso algunos norteamericanos”.
¿Por qué el nombre de la doña?
Al ser consultada sobre cómo surgió el nombre de “La Dona”, nuestra entrevistada señala que al comenzar su negocio los clientes comenzaron por llamar de esa manera, además que a su abuelita materna la llamaban de esa forma razón por la cual tomó la decisión de ponerle a su primer carrito, de igual al segundo en el 2019 y el tercer punto de venta el nombre de Antojitos Mexicanos “La Doña”, este último abierto en el año 2023.
Su máximo sueño
Pero como buena emprendedora, la mexicana Areli Pacheco, sueña con un día no muy lejano ser propietaria de una cadena de carritos y locales de puntos de venta de antojitos mexicanos en los cuales pueda seguir ofreciendo: chicharrines, palomitas, dori esquites, chicharrón preparado, chileatole, churros, esquites, elotes, tamales, champurrado, tacos dorados, tacos árabes, tostadas, tortillas de pollo enchilado entre otros antojitos.
Generadora de empleo
Areli Pacheco, por otro lado señala que a través de sus tres puntos de ventas, de antojitos mexicanos, le llena de emoción y mucha alegría el saber que genera empleo para 8 personas.
El apoyo de su esposo
Pero al lado de esta gran mujer, está su esposo Eduardo …quien la apoya día a día para hacer crecer su emprendimiento, y alcanzar algún día no muy lejano su mayor sueño, como es expandir su negocio y así también generar más trabajo, que la amplia variedad de antojitos mexicanos que prepara llegue al paladar de más personas.
Anécdotas
Durante estos 13 años como propietaria de Antojitos Mexicanos “La Doña” a Areli Pacheco también la han acompañado instantes anecdóticos algunos de ellos tristes.
“Hace años atrás, una cliente estaba con su hija más pequeña cuando de un instante a otro se pierde, y la pequeña toma la decisión de ir a uno de mis negocios que está ubicado a 2 cuadras, cuando le observo le pregunte con quien estaba, a lo que la pequeña me respondió que se encontraba perdida, gracias a Dios tenía el número telefónico de su progenitora e inmediatamente le informe que su hija estaba conmigo”, contó con la voz entrecortada nuestra entrevistada.
La muerte de clientes
De igual manera, Areli Pacheco, más conocida como “La Dona”, señalo que una de las anécdotas más triste, fue el asesinato de un cliente, como también la muerte por un infarto de un comprador, el cual días atrás había estado dialogando con su esposo Eduardo.
No todo es color de rosa
Si bien es cierto que en la actualidad es propietaria de tres puntos de venta de antojitos, y cuenta con miles de clientes, no todo es color de rosa “La Dona” manifestó los meses más complicados son enero y febrero, ya que las ventas disminuyen de manera considerable, ella argumenta que ello se debe a la inclemencia del clima.
Una relación que va más allá de vendedor a cliente
Finalmente nuestra entrevistada indicó de manera muy entusiasta, que durante estos 13 años que lleva vendiendo antojitos mexicanos, la relaciones que mantiene con muchas personas que acuden a sus tres puntos de venta va más allá de vendedor a clientes, pues ha establecido con muchos de ellos un alto nivel de amistad, aprecio y respeto mutuo todo lo cual la anima día a día a seguir creciendo no solo como emprendedora sino también como ser humano.
